jueves, 17 de diciembre de 2009

Mis problemas con los taxistas


Es de todos sabido, nunca me he llevado bien con los taxistas. Es más, el gremio del taxi me repugna. Ya sea en Madrid, Tegucigalpa, Sebastopol o Sao Paulo, el pelas es de natural un hombre casposo, zafio, facheti, un quejica redomado más vago que la chaqueta de un guardia. Me dan conversación cuando ni un pimiento me apetece hablar con ellos. Y viceversa, cuando estoy entonado, ellos -ese gremio- me rechazan. El taxista es un hombre alérgico al jabón, machista hasta las trancas (excelente idea la del ayuntamiento de Barcelona: taxis sólo por y para mujeres ¡Bien por Hereu!), ultra por lo general del equipo del gobierno (ora Madrid, ora Barcelona), irredento seguidor de fina música (Radio Olé en Madrid, Radio Tele Taxi en Barcelona). Los veo en la estación de Atocha, miríadas de taxistas charlando del partido de turno, otros -los más leídos-hacen crucigramas, esperando al japonesito de marras y endiñarle 50 ecus mínimo. Aunque se dirija al Museo del Prado. Qué vergüenza. ¿De qué se quejan estos rufianes?

Por su atuendo les conoceréis. Ésta es otra; al menos hace (muchos) años iban uniformados; un discreto guardapolvos azul marino les quedaba que ni pintiparado. Ahora todo vale: los he visto en mi ciudad en chanclas, pantalones cortos, en camiseta de tirantes. Detengamos esta ignominia, pongamos coto a este nefando comportamiento. Ahora mismo oigo en el Telementiras que se quejan de no-se-qué, que don Mariano les ha recibido y ha escuchado sus plegarias. Ellos a lo suyo, su bandera es el pataleo.

Pero queda la esperanza. Confío ver una noche a Travis Bickle, en ese ataúd amarillo, que descabece a su gremio de robaperas, el único no-taxista que puede acabar con sus compañeros majaderos. Lo estoy esperando.

3 comentarios:

  1. A ver bonita. Tú ser majadero. Yo un taxista honrado. Si yo tener que coger un taxi nunca contigo porque tú no ser nada guapa ni fina y apestas seguro a Ducados.

    Lee lo que quieren hacer con los taxistas y opina.

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  2. Es un gremio que da grima, suplemento por aquí, suplemento por allá. La primera palabra que enseña un taxista a su hijo: la ese con la u... s-u-p-l-e-m-e-n-t-o-. ¡Bien muchacho!

    Fumo americano emboquillado y a mucha honra. Aunque el Ducados no está nada mal.

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  3. A ver bonita.

    Tú cuando trabajas te paga tu empresa suplementos: vacaciones, bajas, pagas extras...

    A mí nadie pagarme nada. Si yo ponerme malo no pagarme,las vacaciones tampoco, no tener pagas extras... Los suplementos ser un acuerdo del gremio

    A ver si tu escribir algo sobre esos futbolistas ingleses que tanto a ti chiflarte y sus suplementos.

    Me da igual lo que tu fumar pero con esa cara yo nunca cogerte en un taxi. Mi estomago empezar a salir cosas raras y yo tener que limpiar el coche que no está incluido en suplementos

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